Teniendo en cuenta el lento transcurrir de este HERRRRMOSO día Domingo, y que mi querido hermano había gastado 30 pesos en dos entradas para la Daicon Party XXXII (¿treintaydós? faaaa…), decidí aprestarme hacia el moderno y fino (?) Paseo la Plaza, a disfrutar una bonita tarde de sol, animé y narutards (?)

Al bajarme del colectivo de la línea 6, me enfrenté con la cruel realidad: el Paseo la Plaza era un quilombo. Una horda bestial de emos, floggers, narutards y especies varias, invadían la húmeda locación, mientras los chillidos de niñas de 14 años de pelos fulorescentes y/o mochilas con más pines que el cielo estrellas, destruían los órganos auditivos de los que se encontraran a 10 metros a la redonda.Si, ya se que están pensando. Que con el pasar de los años, me he convertido en el clásico “fandomero viejo choto que se queja de todo”. En realidad, lo de fandomero y viejo choto es de lo más cierto, aunque debo aclarar que siempre me he quejado de los grupos de zombies de colores que adoran a las banditas ponjas pop-visual de moda y en la actualidad, siento un odio especial por los fans a ultranza de Naruto (?).

¿Es humanamente posible que nos encontremos un Sasuke, un Naruto o un Kakashi en cada metro cuadrado? ¿Serán sus técnicas ninjas que les permiten estar en todos lados a la vez? ¿Estarán emparentados con los Zerg? ¿Se imaginan un Narutard Rush sobre la Estrella de la Muerte? ¿Por qué Maradona insiste con convocar al pechofrío de Riquelme? (?)

Quitando, subrayo, la enorme cantidad de juventud que inundaba las instalaciones paseolaplazísticas (?) y a pesar del consecuente aire enrarecido y cuasi asfixiante en las instalaciones bajo techo y de la lluvia que dominó la jornada, considero el evento como aceptable (especialmente considerando que sale 15 pesos nada más).

Siento que debo recalcar ciertos puntos flojos que vienen repitendo en las convenciones. Un ejemplo claro de estas falencias, es anuncias “20 stands” de los cuales el 90% son venta de pines, mochilas y remeras, la mayoría de las cuatro o cinco series “de moda” (pero no puteo contra Bleach, porque me cae bien (?)). Realmente me parece que sería interesante que se les de un lugar de expresión a la gente del fandom local, ya que brilla por su ausencia desde que liquidaron a Fanatix, la presencia de la escena del fanzine, foros y organismos multicelulares similares (?), dentro de los eventos.

Un punto interesante, es que esta vez el buffet de comida oriental, realmente tenía cosas interesantes adicionales a las ya clásicas sopas ramen, como los legendarios dulces Pocky y unos cositos con forma de Koala y rellenos de chocolate. Si bien no había ni obentos ni nada muy raro, es un avance a la comida que se ofrecía, por ejemplo, en el Animeku (Sopas Maruchan y sánguches de salame y queso. Posta).

En cuanto al cosplay, como siempre, hay de todo. Desde la típica minita que se pone un uniforme (genérico) de colegiala japonesa y dice “soy Rukia de civil” y cuando sube al escenario, lo único que atina es a saludar con un gesto claramente consecuencia de un ataque de pánico, hasta el fanático que se disfraza a todo trapo y hace una performance de puta madre en el escenario. Debo aclarar que evidentemente la importancia del evento hace que el último grupo sea de los menos, ya que evidentemente todos están guardando sus mejores cartas para el inicio de las etapas previas a la Yamato Cosplay Cup.

Aunque lamentablemente por la pedorra camara de fotos que poseo, no tengo buenas fotos del cosplay, debo destacar las actuaciones de un muchacho disfrazado de Yamcha (con volteretas y todo), un niñito caracterizado como Gohan Saiya 2 (con mímica de la escena final del Cell Game incluída) y un grupo de gente disfrazada de los personajes de Tengen Toppa Gurren Lagann, que hicieron una muy buena actuación (la cual incluía una muy bonita Yoko, que tengo bien documentada en las fotos que están al final del post)

Con esto, solo queda decir que espero que la apertura de Yamato Argentina, vuelva a llevar a la gloria de antaño (?) a las convenciones de animé, comics y porquerías similares. Yamato Awake, ¡allá vamos!

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