Niñas y niños, ha regresado el único ente que se digna a escribir últimamente en este pobre blog. Hoy les traigo mi crónica del Anime Friends Argentina 2010, organizado por la gente de Yamato Argentina.

Como de costumbre, mi asistencia se limitó al día domingo, debido a que usualmente es el día “fuerte”. Una vez más la vida me hizo recordar que no siempre tomo buenas decisiones (?).

Arribé al evento promediando las dos de la tarde. Posta loco, dejense de joder. ¿A quién se le puede ocurrir abrir un evento un domingo a las 10 de la mañana? ¿Soy yo o el público al cual apuntan son los jóvenes argentinos(?) de 14 años que compran pines de Naruto y Bleach?… a los del AniBeat los deben haber ido a ver los parientes y amigos nada más.
A minutos de mi arribo al predio arrancó el cosplay, y una bonita llovizna como para acompañar. El desfile de mascaritas(?) presentó bastante calidad en cuanto a disfraces en sí y una carencia enorme de talento en la mayoría de las performances: salvo honrosas excepciones, menos onda que bandera de chapa(?).

Para este humilde asistente, lo más divertido fueron los errores de Mariano Takara (cantante de Parraleños), que a pesar de sus falencias en conocimiento de manganimé le puso toda la onda. En cuanto al aspecto sonoro, creo que todo espectador de los cosplays de Yamato concordarán en la aplicación del “rifle sanitario” para con los encargados de poner la música: esos que dicen ser “DJ”. Epic win para “Don Ramón”, prácticamente el único que no recibió una andanada de insultos e improperios varios de parte de la (húmeda) turba enardecida.

Para sacudir el frío, Mariano improvisó “Megadeth” (de Parraleños), para alegría y disfrute del todo el público poguero, dedicándole la parte de “matemos al maldito DJ” a los entes que pululaban por la torre de control(?) del sonido.

El Animeke Categoría A fue en versión extra small, con sólo cuatro concursantes. Una definición por penales(?) ante Tolkki le dió el triunfo del certamen a la bella Hitomi, la cual nos deleitó con una haaarrrmosa interpretación de “Only One” opening de “Digi Charat”.

Entonces, visto y considerando que “The Kyoto Connection” (la banda nacional asignada) no aparecía, decidí guarecerme del frío y la lluvia (es que destiño si me mojo mucho) en las espaciosas instalaciones techadas del Instituto San Antonio. Craso error.

Amagué a ver que había para comer en el buffet: la cola que había y los desorbitantes precios me hicieron desistir inmediatamente del intento. Encaré entonces hacia el “Manga Café”, esperando encontrar un asiento y un poco de café caliente para paliar los efectos de la incipiente hipotermia que sufría. Otra vez a hacer cola como si fuera a pagar la moratoria del ABL (?). Al llegar a pasitos de la escalera, las instalaciones eléctricas empezaron a sufrir el complejo del “arbolito de navidad”. Entre cortes de luz, el staff de Yamato anuncia que en el “Manga Café” no había café (porque no pueden calentar el agua sin electricidad) y no era posible leer mangas (porque el lugar era muy oscuro). No me quiero imaginar lo que deben haber despotricado con los cortes en el suministro eléctrico las pobres almas en la sala de proyecciones y en la carpa de los torneos de videojuegos (me llegó el comentario de que se quemó una Wii. May it rest in peace).

Una vez que pude entrar, por obra y gracia de poderes fuera de mi alcance, la electricidad volvió para quedarse. Lamentablemente, para cuando llegué, lo único que quedaba aparte del café eran unos Pocky (truchos) a 15 pé la caja y unas bolsitas de mashmallows. De medialunas, ni hablar. Menos mal que la infusión anteriormente conocida como café (?) estaba a dos pesos el vasito. No agarré nada para leer, porque entre la espera, los cortes de luz y el frío polar, se estaban haciendo las 18, hora de inicio de lo único por lo que fui: el Super Friends Spirits.

Como de costumbre, el show de los artistas nipones fue impecable. En lo personal fui especialmente a ver a Chihiro Yonekura, que canta dos de mis openings favoritos: “Will” (opening de “Senkaiden Houshin Engi”) y “Arashi no Naka de Kagayaite” (opening de “Gundam the 08th MS Team”). Completaban la formación del Super Friends Spirits: Aki Misato (Mai-HiME, Strawberry Panic!), Kouji Wada (Digimon) y Ricardo Cruz (los coritos(?) de Jam Project)

La variante en esta ocasión fue la banda en vivo para acompañar a los artistas, rol que cumplieron perfectamente los brasileros “Wasabi”, con una excelente performance arriba del escenario.

El violero de Wasabi tocó un pedacito del himno, Chihiro cantó una parte de “Don’t cry for me Argentina” y todos contentos y peronistas (?). Cabe aclarar que me fui antes de la finalización del recital, por varias razones: hacía frío, me cerraba el stand “Anime Action” y ya estoy podrido de ver a Wada (quién estaba por tercera vez en los escenarios porteños) cantando “Butterfly” (?)

Una veloz recorrida por los stands de las carpas (con cuidado de no hacer olas con el agua acumulada en las alfombras), la compra de un bonito “Gundam Deathscythe Hell Kai HG” y fin del evento para mi.

Las instalaciones claramente no estaban preparadas para la lluvia con afluencia de tanta gente, los precios del “Asian Food and Drinks” eran caros (y no te dejen entrar comida), y la organización se notó desbordada por las cirscunstancias, debiendo haber considerado la probabilidad de lluvia en pleno invierno. Y 30 pesos per cápita no es exactamente un bono contribución a una sociedad de fomento. Creo que el Nichia estaba mejor preparado ediliciamente (a pesar de todas sus falencias) para albergar un evento de estas características.

Yamato Argentina es el único organizador que arma eventos con artistas de animesongs por estos lares (aunque en esta ocasión hayan sido de “segunda línea”) y nos guste o no, como diría cierto ex-técnico de la selesió: “la tenemos adentro”.